15 agosto 2007

ESCUDOS DE ARMAS: ANCLADOS EN EL PASADO


“Llamar pomposamente “escudo” a un simple logotipo que solo sirve para actos de promoción con la idea, alegaron para su justificación, de dar una nueva identidad visual es una aberración”

Pedro González-Sosa.
La Provincia, 24 de julio de 2007


El historiador guiense denuncia el mal uso del término “escudo” para referirse a la marca del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, aún cuando tampoco él usa correctamente el término “logotipo”, que designa a un distintivo exclusivamente formado por letras, como su etimología indica y que no es, precisamente, el caso del nuevo identificador gráfico del Ayuntamiento. Pero, a parte de esto, en el escrito, muestra principalmente su preocupación porque el nuevo emblema pueda suplantar al antiguo escudo de armas de la Ciudad y defiende la idea de que vuelva a usarse el escudo de armas como identificador en todos los soportes de “cartelería, vehículos, mobiliario fijo y móvil y anuncios”. No debería existir la preocupación de la desaparición de los escudos de armas ante los nuevos distintivos gráficos porque son cosas diferentes, y además porque, como sabemos, la ley defiende la exclusividad del escudo heráldico en determinados usos.

Otra cosa distinta es lamentarse de que las tarjetas de visita, la gráfica promocional, los vehículos, las papeleras, y las tapas de las alcantarillas, por poner un ejemplo, no sigan llevando el histórico blasón. Aquí nos topamos con una auténtica contradicción, puesto que los escudos de armas no sólo no fueron creados para esta funcionalidad, y por tanto, se está insistiendo en adaptarlos a un uso que no les es propio, sino que además, lo cierto es que cuando fueron “diseñados” ni siquiera existía la imprenta, el automóvil, o la recogida de basuras. Una cosa es respetar la historia, y otra cosa bien distinta pretender que nos anclemos en ella. ¿Acaso se le ocurre a alguien que, en el día a día, el alcalde se desplace a caballo y lleve armadura?

Lo que sabemos todos los grafistas y expertos en comunicación es que los escudos de armas no reproducen bien en la mayoría de los tamaños en los que se ha de usar una marca, ni en la mayoría de los soportes corporativos y de comunicación propios de las necesidades de una institución del siglo XXI y que tampoco, sus motivos son en la mayoría de los casos representativos para el ciudadano de hoy en día. Y es que la realidad es que el escudo de armas, con todos los respetos hacia su historia, no fue creado ni “diseñado” para las funciones para las que sí se proyecta un imagotipo.

08 agosto 2007

EL EFECTO YO-YO DEL CARTEL DE SANTA CRUZ

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Este año el Ayuntamiento de Santa Cruz ha decidido que no necesita más polémicas y le ha encargado el cartel a Juan Galarza un pintor que realizó el primer cartel del carnaval allá por 1962. Después del estrepitoso fracaso, el año pasado, de la gala que organizó Rafael Amargo y la mala acogida que tuvo el el "vanguardista" cartel que le encargaron a Karim Rashid, un interiorista y diseñador de muebles y moda neoyorkino, han optado por volver al siglo pasado, directamente.

Parece ser que la mayoría del público está emocionado con la vuelta atrás, y digo yo: ¿es que no hay términos medios, ¿es que no hay diseñadores de este siglo en Tenerife?... Pues ¿no tienen ahí una facultad de Bellas Artes donde se imparte la especialidad de Diseño Gráfico desde hace décadas?... Estos políticos cada día andan más perdidos, si todo lo llevan igual, ¡sálvese quien pueda!.

El autor ha declarado frases como ésta: "lo mío no son los ordenadores", "mi idea es recuperar lo tradicional del carnaval", "he añadido serpentinas haciendo el símbolo de la pintadera" -qué tendrán que ver las pintaderas de los aborígenes grancanarios con el carnaval chicharrero- y aseguró que su idea era recuperar "lo tradicional del Carnaval" y "Ésa es mi idea y yo soy yo y voy a ser siempre igual. (...) con toda la honradez con la que se pueden hacer las cosas cuando uno trabaja para uno mismo" (¿para uno mismo?, pero, ¿¿¿no fue un encargo???).

El motivo principal del cartel de Galarza es un arlequín tocando la mandolina. Sinceramente, ¿creen Uds. que este cartel representa más la realidad del actual carnaval?


* El cartel de este año es el de la derecha, parece ser que se olvidó de ponerle la fecha... ;)

05 agosto 2007

EL "NO-CARTEL" DEL CARNAVAL DE LAS PALMAS

Una vez más la falta de conocimiento de los que dirigen esta ciudad se pone de manifiesto. Vean los siguientes aspectos de las bases del concurso del cartel de carnaval que así lo manifiestan:

Primero, un disparate: Se enumera "diseño gráfico" como una de las posibles técnicas a emplear en la elaboración de la propuesta. Expliquémosle al osado que elaboró las bases que el diseño gráfico no es ninguna técnica de representacion. Que un cartel es diseño gráfico en si mismo, que el diseño gráfico es la labor de proyectar la conjunción de imagen y texto con el fin de comunicar algo.

Luego, se dice que "la comisión que valorará los carteles estará formado por profesionales de la comunicación, el arte y la publicidad". No se nombra a los profesionales del gráficos que son los únicos que podrían valorar la profesionalidad del trabajo. Por otro lado, ¿a qué profesionales del arte se refieren?: ¿pintores, músicos, escultores, cantantes, fotógrafos, "bailaores"…? Pero, ¿qué opinión pueden tener estas personas sobre la eficacia y la calidad de un trabajo de comunicación gráfica? Porque, una vez más repetiremos: el diseño no es arte. El diseño se crea con un fin funcional.

Y, para rematar la faena, en ningún sitio de las bases se incluye el texto que hubiera de llevar el cartel. En resumen, que es un "no-cartel", que no dice nada: Ni lo que anuncia, ni dónde se celebra, ni cuándo, ni quién lo organiza, ni nada… En fin, como siempre, al final le darán a los de la imprenta "la obra" para que se las arregle y meta los textos donde quepan. Si hay suerte se leen y, si no, no.

No estaría mal que, después de un siglo de historia, consigamos que se sepa qué es un cartel, para qué sirve y quién lo diseña.

04 agosto 2007

VUELVE EL CONCURSO DEL CARTEL DEL CARNAVAL DE LAS PALMAS



Este año, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha vuelto a la vieja práctica de elegir el cartel del carnaval, la fiesta más importante de la Ciudad, mediante concurso abierto. Ante los dudosos resultados que solía dar esta modalidad, los anteriores dirigentes capitalinos habían escogido la fórmula de encargar el anuncio de las fiestas a algún renombrado pintor. Demostraban de este modo su preocupación por el problema de la falta de profesionalidad de los carteles que se presentaban pero, también, sin quererlo, una absoluta ignorancia sobre el tema que estaban tratando. Aunque retomar la antigua fórmula del concurso puede aparecer como una muestra de mayor conocimiento por parte de los actuales mandatarios, ya que se dejan de utilizar obras artísticas que no cumplen con la función de comunicar, anunciar y promocionar -un buen cartel puede llegar a considerarse una obra de arte, pero una obra de arte no es por si misma un cartel-, las bases del mismo demuestran todo lo contrario.

Una vez más se demuestra la falta de criterio de los que dirigen esta Ciudad y, en particular en este caso, de la Sociedad de Promoción de Las Palmas de Gran Canaria.